Quiero dedicar unas palabras, que no pretendo que sean de despedida, sino de
agradecimiento, a
todos los alumnos,
los de este año y los de años anteriores que por problemas familiares o
de horarios no han podido asistir a clase este curso y de los que guardo
también un bonito recuerdo.
Al llegar a la edad de jubilación
voluntaria, he decidido dar este paso ya que creo que después de 37 años en la
enseñanza necesito dedicarme a otros proyectos vitales. El tiempo pasa tan
rápido y ¡quiero hacer tantas cosas en mi vida! No por ello me olvido de esta
etapa profesional que me ha dado tanto, a veces sinsabores pero también
alegrías y buenos momentos. Me he dedicado todos estos años a esta profesión de
maestra (porque yo me considero maestra) en cuerpo y alma dando lo mejor de mí,
esforzándome por innovar, por buscar fórmulas para que mis alumnos pudieran
aprender y si era divirtiéndonos todos, mejor aún. Como decía Mary Poppins “a
spoonful of sugar helps the medicine go down”. Espero haberlo conseguido y si
no ha sido así al menos me quedo con la conciencia tranquila de haber hecho
todo lo que estaba en mi mano para ello.
Aunque
la decisión la tenía tomada desde hacía tiempo no he querido comentarlo
hasta casi el final porque quería disfrutar de este último curso y
hacer lo que siempre he hecho en mis clases y también que vosotros
actuarais con normalidad como si fuera un curso más...
He
de decir que la decisión de jubilarme me ha costado mucho tomarla y a
veces no sabía si era lo mejor para mí o no... Sé que lo voy a echar de
menos porque este trabajo ha sido un hobby para mí, al que he dedicado
toda mi vida. Algunos de vosotros me habéis preguntado si no me da pena,
claro que sí, ¡cómo no lo voy a echar de menos! pero todo este curso me
he ido preparando para aceptarlo como un proceso más de la vida...
Quiero
agradeceros el haber estado
ahí incondicionalmente, sin importar el horario de las clases, la
lluvia, el frío, el
calor… Eso me ha dado ilusión para seguir adelante e intentar dar lo
mejor de
mí. Yo también he aprendido mucho de vosotros, de vuestra ilusión por
aprender y vuestra constancia. No cambiéis, seguid así…con esas ganas de
evolucionar y aprender…
Yo tengo mucha ilusión puesta en esta
nueva etapa que voy a comenzar pero siempre os recordaré a todos con mucho
cariño. Con algunos he compartido más que horas de clase…hemos
compartido confidencias, alegrías, risas, también sinsabores de la vida,
aflicciones, y en algunos casos incluso la partida de seres queridos… Por todo
ello habéis sido como una segunda familia para mí y no os olvidaré. Pero
repito, esto no es un adiós… it's not
goodbye but see you later… ¡Quién sabe si en el camino de la vida no nos
volveremos a encontrar! ¡Dejemos abierta la puerta a ver qué pasa!…